Justin Reid-Ross, jugador internacional de hockey hierba surafricano que juega actualmente en el AH&BC en Ámsterdam, estudia el Máster en Gestión Deportiva en Johan Cruyff Institute y nos explica lo complicado que es gestionar éxito, fracaso y pérdida de poder
Los Juegos Olímpicos son la Meca del mundo del deporte. Como jugadores de hockey, crecemos soñando en alcanzar esa cita y, si somos lo suficientemente afortunados, la oportunidad se nos presentará una vez en la vida.
El éxito y el fracaso son parte integrante del deporte de alto nivel, pero el hecho de participar nos permite experimentar esas sensaciones. Si no participas, no puedes sentir la agonía del fracaso ni vivir la euforia del éxito. Mi experiencia olímpica hasta ahora ha sido una prueba y un desafío. Mi nombre es Justin Reid-Ross, jugador de hockey en la selección sudafricana, actualmente jugando en Holanda y compaginando mi carrera deportiva con los estudios del Máster en Gestión Deportiva en Johan Cruyff Institute Ámsterdam.
Os voy a explicar una historia que se remonta al año 2000. La selección surafricana de hockey se clasificó para los Juegos Olímpicos de Sidney, pero no acudió a la cita, no participó. Eso fue antes de que llegaran mis días como jugador internacional, pero recuerdo perfectamente cómo mis sueños se hicieron añicos. No sólo por esos jugadores que se perdían los Juegos Olímpicos en el año 2000, sino también por los jugadores de mi generación que serían privados de ver a sus ídolos compitiendo contra los mejores.
En 2012, cuando yo ya formaba parte de la selección, tuvimos dos oportunidades para clasificarnos para los Juegos Olímpicos de Londres: primero, ganando el campeonato continental africano (el criterio oficial de clasificación), y después ganando el Pre-olímpico, cosa que hicimos. Londres’2012 fue el momento más importante de mi carrera deportiva. Disfruté cada segundo de la experiencia, pero a la vez me dejó con ganas de más. Cuatro años más tarde, se repite la situación, pero con un resultado mucho peor. Hemos conseguido la clasificación según los criterios de la Federación Internacional, pero nuestro Comité Olímpico ha decidido no mandarnos a los Juegos Olímpicos de Río’2016.
La razón es que nuestro equipo no parece estar entre los aspirantes a medalla. El hockey en Río estará dominado por los cuatro grandes: Australia (campeón del mundo), Alemania (campeón olímpico), Holanda (campeón de Europa) e Inglaterra, también con opciones a luchar por las medallas. Entre los otros aspirantes estarían: Bélgica, Argentina, India y España y los ocho clasificados para el torneo son equipos de mucha calidad, que llevan mucho tiempo preparándose y tienes recursos casi ilimitados.
Quizás trasladar a la gente joven la idea de lo importante que es la pasión y el sentimiento de orgullo cuando representas a tu país en unos Juegos Olímpicos, y a la vez la posibilidad de hacer historia estando entre los 10 mejores equipos, sería un objetivo más realista y una visión a tener en cuenta. Encajar el éxito con humildad y el fracaso con dignidad es un reto para cualquier deportista joven, pero ambas cosas son infinitamente más fáciles que asumir que te roban tus sueños por algo que está fuera de tu control. Esto es algo para lo que creo que nunca estás preparado.
Me siento afortunado por tener la oportunidad de compaginar mi carrera deportiva con el Máster en Gestión Deportiva porque supone para mí nuevas oportunidades en el mundo del deporte. Y tengo también la esperanza que la carta olímpica sea recordada por los que tienen en sus manos nuestros sueños: “Lo más importante en unos Juegos Olímpicos no es ganar, sino participar, al igual que lo más importante en la vida no es el triunfo, sino la lucha. Lo más importante no es haber ganado, sino haber competido bien”.
Programas académicos
- Máster en Gestión Deportiva Online: 19 Septiembre, 2016
- Máster Universitario en Gestión Deportiva Online: 19 Septiembre, 2016
- Máster Universitario en Gestión Deportiva Barcelona: 19 Septiembre, 2016
- Máster en Gestión Deportiva Semi presencial: 23 Septiembre, 2016